Escribo esto sentado en un avión ya regresando a casa después de 10 días de andar fuera y lejos.
Pero sí, que viva aquel que no te agrada, porque por el también vino Jesús a morir.
Nuestros sistemas de pensamiento están tan mal ubicado que después de un tiempo de vivir asumiendo que nuestros punto de vista es el correcto y todos los demás están equivocados, empezamos a pensar inconscientemente que Dios está hecho a nuestra imagen y semejanza.
Pensamos que Dios tiene nuestros gustos, que El piensa como nosotros. Pensamos que El oiría nuestra música y usaría nuestra ropa.
Esto sigue una espiral descendiente que luego nos lleva a pensar que Jesús sólo ama a los que nosotros amamos. QUE ARROGANCIA.
Lo peor es que muy seguido me veo pensando así. Resulta que por lo egocéntrico de mi corazón, yo asumo que Dios ama al que yo amo, y no ama al que yo no amo.
jajajajaajajajaja, eso ha de hacer reír a Dios tan fuerte ...
Dios amó tanto a Evo que dio a su único hijo por él. Lo mismo hizo por Chavez y por Fidel . Y en lugar de entrar en juicio ridículo de enumerar las cosas por las cuales es obvio para nosotros por qué estos personajes no están en la “voluntad de Dios”, porque no enumeramos las cosas por las cuales es obvio que NOSOTROS no estamos en la voluntad de Dios y dejamos el juicio a Dios. El que perdió su vida fue Jesús, no yo, entonces es El el que debe decidir qué onda con estos, no yo.
El Sermón del Monte se dio en parte para estos casos.
Si por nuestras inclinaciones políticas y/o morales vemos a estos como nuestros enemigos y no los estamos amando, estamos en violación de los principios delineados por Jesús, porque
¿qué parte de “amad a vuestros enemigos” no entendemos?
Jesús murió por tus enemigos también, no sólo por los que te caen bien.
Eso es una verdad.
Escrito por Junior Zapata
