Y pasa el mes de Febrero y paso el campamento de jóvenes La Roka 2010, donde quedaron grabadas en nuestras retinas cientos de vivencias, anécdotas para recordar y momentos para no olvidar. Gratos momentos, que siempre al pasar el tiempo y los años, cuando vamos madurando, nos marcan la vida, para tener en cuenta ese encuentro con el Señor, esa reconciliación de volver a estar a su lado o tan solo esa experiencia sobrenatural que solo la puede dar el Espíritu Santo.
Muchos de nosotros ya pasamos varios campamentos o retiros de jóvenes, pero nunca uno es igual al otro, cada uno tiene su propio aroma, su propio color y su propio sabor, algunos mas intensos que otros pero todos ellos nos ayudan a vivir inolvidables instantes de placer en su presencia sin dejar escapar ni una sola partícula de gozo y paz que solo él la puede dar.
Seguimos firmes y esperamos que llegue el mes de julio para poder pasar nuevamente otro tiempo de acercamiento al creador, un tiempo de nuevas vibraciones que pasaran por nuestros sentidos y quedaran archivadas en nuestras neuronas, otorgando ese alivio al alma que tanta falta nos hace.
Te esperamos con ansias mes de julio, para el próximo campamento de invierno 2010, pero esta vez será mas profundo e intenso, esta vez será una experiencia nueva para jóvenes audaces y comprometidos. Gracias Señor, estamos en carrera…
Pr. Horacio Santa Cruz
